30 de septiembre de 2008

Incomprensiones al Incomprendido

Miré pero no pude ver.
Escuché sin incluso oír.
No descifré el código secreto
no entendí siquiera un mensaje
menos pude captar la lejanía...
Sus cálidas palabras en mis oídos
vacías de contenido me advertían
no seguir adelante con el plan...
No dirigir más allí mis sentidos,
en su rumbo no iba mi destino.
Y tenía novio...
Me arrepiento hoy, de nunca
siquiera aquel día,
haberle entendido.

29 de septiembre de 2008

El breve espacio en que no estás


Todavía quedan restos de humedad,
sus olores llenan ya mi soledad,
en la cama su silueta
se dibuja cual promesa
de llenar el breve espacio
en que no está...

Todavía yo no sé si volverá,
nadie sabe, al día siguiente, lo que hará.
Rompe todos mis esquemas,
no confiesa ni una pena,
no me pide nada a cambio de lo que da.

Suele ser violenta y tierna,
no habla de uniones eternas,
mas se entrega cual si hubiera
sólo un día para amar.
No comparte una reunión,
mas le gusta la canción
que comprometa su pensar.

Todavía no pregunté "¿te quedarás?".
Temo mucho a la respuesta de un "jamás".
La prefiero compartida
antes que vaciar mi vida,
no es perfecta, mas se acerca
a lo que yo

simplemente soñé...

Pablo Milanés

22 de septiembre de 2008

21 de septiembre de 2008

Maneras de Matar

Hay muchas maneras de matar...

Pueden meterte un cuchillo en el vientre,
quitarte incluso el pan.
Pueden no curarte una enfermedad,
y hasta meterte en una mala vivienda.
Pueden empujarte hacia el suicidio,
o torturarte hasta la muerte por medio del trabajo.
Imagina que hasta pueden mandarte a la guerra...

No te asustes pues sólo pocas de estas cosas están permitidas en nuestra ciudad.

Bertolt Brecht

20 de septiembre de 2008

Versiones sobre Salvador Allende


Soy Daniel, un ser humano común. La forma circunstancial en que se ha desarrollado la historia de mi vida queda al margen, al igual que la carrera que hoy desempeño, todo conocimiento que se plasme ahora en este artículo ha sido configurado durante un proceso denominado "Memoria Histórica Personal y Colectiva", que esta más relacionado con el conjunto de factores entrelazados y estructurados a modo de configurar la totalidad de mi opinión. Si hay elementos, a ojos de ustedes, erróneamente testificados es por que tan sólo no han sido refutados por nadie aún.
Es importante aclarar que hoy, hablar sobre Salvador Allende me apasiona, nada más que por ello escribo y lo describo.
Voy a partir de la premisa de que la memoria histórica no se debe jamás silenciar, si es que la penumbra y la censura tapan los hechos que configuran nuestra identidad, surgen las divisiones que nos llevan a confundir el rumbo, distinguiendo y excluyendo a partir de un "nosotros". Si las cosas no se discuten, siempre van a ver diversas versiones de lo ocurrido que emerjan como murmullos del silencio.
Personalmente yo no creo en el consenso. Razón por la cual siento que los acuerdos mutuos ocupan un lugar en la historia luego de que uno de las versiones se ha podido imponer sobre las demás. Por esto ustedes sabrán que nunca se habla de la historia de los vencidos.
Teniendo esto claro, me gustaría referirme a la figura de Salvador Allende como una figura históricamente relevante. Más allá de que se deposite tras una persona, la responsabilidad histórica de dividir por entero a un país, es conveniente situar a tal personalidad tras un contexto socialmente elaborado, Allende es un personaje creado por las relaciones sociales, configurado sobre su misma sociedad y por la memoria histórica que ella conforma. El compañero presidente era una persona muy sola, como un artista con una sensibilidad especial, guardaba siempre un espacio para lo íntimo. Este hombre fue un político, sin lugar a dudas no era una persona común, fue elegido por un 36,4 por ciento de los votos luego de más de 20 años de carrera política. Manifestaba claramente la forma de pensar de un número importante, en Allende se depositaban de manera excepcional los valores democráticos y el pensar de una mayoría.
Situándonos y observando detalladamente el contexto histórico, podemos observar que Salvador Allende tiene un discurso muy interesante, abierto para el análisis, con un profundo contenido libertario y marxista, lleno de ideología. El hecho de configurar al pueblo como único forjador de su historia, de nombrar al trabajador como un creador y dueño absoluto de su destino, nos dice algo. Allende era una persona que creía fielmente en el pueblo y en su gente, pues lo conocía y se reconocía él como parte del mismo pueblo y su historia. Dudo profundamente que se pueda volver a encontrar un mandatario con valores más humanistas. Él era una persona que confiaba a tal punto en las personas y en la humanidad, que no se daba la molestia de encontrar culpables ni enemigos en su discurso.
Allende sin lugar a dudas era una persona pacífica. Sobre este punto se encuentra una diferencia abismante en relación al desarrollo de los regímenes de corriente leninista. Salvador Allende no creía en el partido único ni tampoco creía que el capitalismo estuviera radicado en personas con nombre y apellido. Esta persona, gracias a su sensibilidad casi profética sabía muy bien el camino y la forma política de darle cercanía a los escritos de Marx por otra vía, más expedita y mucho más directa, "la vía chilena al socialismo".
Es increíble cómo Allende ni siquiera nombra al imperialismo estadounidense como un elemento discursivo para argumentar su actuar latinoamericanista y unificador. Es como si supiera a ciencia cierta, la forma de no caer en el juego capitalista de la violencia directa y primitiva, pareciera que los que estaban atentando directamente contra su persona ni siquiera, tuvieran el privilegio de figurar en sus discursos. A tal llegaba la paz interna en este hombre que provocaba que la violencia pareciera brutal contra su persona, Allende siempre fue víctima de la injusticia del contexto a lo largo de todo el periodo histórico.
El compañero presidente no se dirigía a nadie más que a su pueblo y no tenia sangre de mártir ni fama de profeta, solo era un hombre... Algunos dicen que era, un hombre que sólo era un pueblo.
Dudo que una persona haya prestado más atención a Karl Marx que Salvador Allende. Yo creo que sabía sus escritos de memoria, y lograba darle interpretación política con éxito, él rescató de la personalidad de Marx, lo más valioso, el amor y la confianza en la humanidad. Él era una persona que sin lugar a dudas amaba al ser humano, de forma casi apolítica, excepcional. Pues Salvador casi no era político, ante mis ojos el compañero presidente era un artista del pueblo.
Desde sus primeros años de vida políticamente activa, podemos observar que Allende no goza de matices políticos, ni cambia de parecer, es una persona que a lo largo de su vida no se radicaliza ni se reformará jamás. La figura de Allende se forja en la ciudad de Valparaíso con enseñanzas de un viejo zapatero anarquista italiano llamado Juan Demarchi. Es sorprendente como a partir de ahí puede enlazar la corriente marxista del socialismo chileno, la praxis social con rasgos de anarco-sindicalismo, teniendo como base el humanismo vanguardista de la época. Allende sabía perfectamente con qué estaba jugando, una persona muy inteligente se formó entorno a una sensibilidad especial. A estas alturas nadie cuestiona eso.
Allende lejos de ser un social-demócrata, era un marxista de tomo y lomo, a mi parecer, más marxista que todos los extremista de la época juntos. Allende, a diferencia de los sectores violentistas, por ejemplo, no manifestaba mayor interés por la revolución bolchevique, él creía profundamente que la revolución debía surgir efectivamente de la masa del pueblo y no de algunos iluminados. Para ello se requería un cambio ideológico de mentalidad individual antes de la revolución social, Allende en realidad combatió contra la forma de pensar de cada uno de los chilenos... -Debe ser extraño (por decirlo poco) que pongan en tus manos, tu propio destino y tu propia historia, de un día para otro-
El marxismo, para esta persona era más que un movimiento de vanguardia, y tenía un objeto mucho más profundo que combatir contra el imperialismo estadounidense. Él sabía que lo importante, antes de una lucha externa, es la estructura histórica de los acontecimientos y la mentalidad de la gente, el pensar del pueblo.
Para un marxista no hay nada que escape de la producción humana, no hay determinación natural ni destino incontrolable. El trabajo nos determina como hombres en la praxis. Pura teoría que figura en la acción política allendista, gracias a ella podemos decir que, por algún momento, Chile fue dueño de sí mismo.
La lucha contra el capitalismo de Allende fue una verdadera revolución. El hombre de la paz contra la violencia pura y primitiva del modo de producción y el sistema infernal. Salvador Allende pudo más, y tengo confianza en la historia y en la gente que finalmente la forja.
A la gente crítica, le recomiendo en una primera instancia, abrirse un poco y no taparse los ojos, eliminar dogmatismos, tal vez leerse un par de libros. Si el conformismo los supera, será por la felicidad remota y los muertos que ella provoca.
No nos callemos jamás y no nos sometamos nunca, seamos libres y dueños de nuestro destino como alguna vez lo fuimos. Ni siquiera nombro la desigualdad porque hoy, hay esclavitud en la gente, esclavitud de pensamiento, sometimiento ante políticas económicas y trabajos forzosos. Relaciones de poder que nos ubican unos sobre otros, violencia extrema.
El que esté conforme con aquello y tenga un poco de amor propio que lance la primera piedra.
Sociedad patronal, en donde Chile es país dependiente, con gente dependiente, con ideas dependientes.... Contra eso, y por un mundo con gente verdaderamente libre, combatía Allende.
El gran Chileno de nuestra historia...

Daniel Salgado

7 de septiembre de 2008

Salvador para el análisis


"Hemos venido a hablarle al pueblo; a hablarle de sus derechos, de sus deberes fundamentales, de sus responsabilidades. Yo quiero que ustedes mediten el alcance y el contenido de mis palabras. Algo grande y trascendente ha sucedido en la patria con la victoria del 4 de septiembre. No ha sido un hecho casual; ha sido el esfuerzo sacrificado y anónimo de millares y millares de chilenos que tuvieron fe en ellos mismos, que creyeron en los partidos populares y que entendieron la gran tarea histórica que debemos cumplir. Éste ha sido el fervor de generaciones y generaciones que supieron de la cárcel, del destierro y de la muerte, para darnos la posibilidad de llegar al Gobierno y conquistar el poder. Pero la victoria alcanzada en las urnas implica una gran responsabilidad, y yo quiero que se entienda muy bien, muy claramente. Desde luego, que se sepa, que se aprecie, que se medite lo que significa que un pueblo por vez primera en la historia, dentro de los cauces legales y de las leyes de la democracia burguesa, haya alcanzado el Gobierno para trasformar la sociedad e ir abriendo camino a las profundas transformaciones estructurales que conduzcan al socialismo. Reitero: es la primera vez que esto acontece. Queremos que las libertades políticas así conquistadas se transformen en libertades sociales. Queremos que cada trabajador comprenda que la teoría revolucionaria establece que no se destruye absoluta y totalmente un régimen o un sistema para construir otro; se toma lo positivo para superarlo, para utilizar esas conquistas y ampliarlas. Es conveniente que eso se entienda y se adentre en la conciencia de cada uno de ustedes. Las conquistas políticas las mantendremos, porque el pueblo las alcanzó en sus luchas y las consagraron las leyes y la Constitución chilenas. Y los logros positivos en el orden económico, derivados del Gobierno Popular de Pedro Aguirre Cerda y expresados en el acero, en el transporte, en energía, combustibles y electricidad, serán puntos de apoyo, para extenderlos y organizar el capital social de que tanto hemos hablado...."

Discurso de Salvador Allende en el dia del trabajador
(1 de mayo de 1971)

4 de septiembre de 2008

Inadaptación...

2 de septiembre de 2008

Soñé contigo esta noche

Soñé contigo esta noche:
Te desfallecías de mil maneras
Y murmurabas tantas cosas…

Y yo, así como se saborea una fruta
Te besaba con toda la boca
Un poco por todas partes, monte, valle, llanura.

Era de una elasticidad,
De un resorte verdaderamente admirable:
Dios… ¡Qué aliento y qué cintura!

Y tú, querida, por tu parte,
Qué cintura, qué aliento y
Qué elasticidad de gacela…

Al despertar fue, en tus brazos,
Pero más aguda y más perfecta,
¡Exactamente la misma fiesta!

Paul Marie Verlaine

R.R.H.H - Relaciones Humanas

A veces sucede que nos sentimos hostigados de convivir con gente.

Sinceramente a mi me resulta muy difícil entablar relaciones con la gente, independiente de la persona con la que comparta, siempre hay un punto en donde uno tiene que hacer cierto esfuerzo por relacionarse con sus pares. Las coincidencias no se dan tan espontáneamente como suele parecer, por ejemplo, al conversar, uno de los dos, siempre tiene que hacer un esfuerzo extra en esa situación. Hay un momento en que uno de los dos tiene que ceder y se tiene que sentir por lo menos un poco incómodo, ante tal o cual tema durante la relación.

La verdad es que yo soy una persona sola, osea, me cuesta hacer relaciones con la gente, y me siento a veces forzado a compartir con mis cercanos, pero no es así siempre, por ningún motivo esto me sucede con la gente que recién conozco. En general es como si me costara hacer relaciones serias y duraderas con el resto, es cierto también que me cuesta tener amigos "de la vida", por decirlo así, pero por ejemplo con mi familia... hay veces en que quiero estar realmente solo.
Hay veces en que realmente siento que no prescindo de nadie, y pienso, - ¿no me estaré volviendo loco?-... Ralskovnikov en Crimen y Castigo...
Siento que algunas relaciones son un poco forzosas, pero me hacen bien a la vez. No sé por qué pero el vivir en sociedad es un conflicto duro, un desafío.... Sobre todo si te esfuerzas un poquito más de modo ambicioso, e intentas compartir con gente muy distinta, extremadamente distinta a ti, tal ves ese es el verdadero desafío de la vida. Algo así como buscar tu polo opuesto....

A pesar de todo, en el fondo no me siento tan solo, bueno, tal ves un poco, pero no por eso me siento mal, ni siento odio u hostilidad por parte del mundo. Simplemente me siento aparte, distinto. Tengo mucho que darle al mundo como este tiene mucho que darme a mí. De eso se trata...

Lo único que me falta es crecer, encontrar mi polo opuesto y volar de este complejo mundo con él.